El 16 de junio de 2019, Argentina y Uruguay vivieron un evento que pasó a la historia. Ante una serie de averías repentinas en el sistema de transmisión de electricidad, 50 millones de personas se quedaron sin electricidad al mismo tiempo. El mega apagón duró horas, pero Ticino, un pequeño pueblo de la provincia de Córdoba, fue el único que pudo restablecer el servicio casi de inmediato. Y todo fue posible gracias al maní, la producción estrella de la región.
Durante décadas, la cáscara de esta leguminosa se consideró un desecho. Se tiraron toneladas hasta que, en 2017, se inició la construcción de una central eléctrica capaz de aprovechar sus propiedades. Usando el subproducto del maní como combustible de biomasa, además de astillas de madera, la planta puede proporcionar electricidad a más de 3.000 habitantes de la ciudad de Córdoba.
“Tenemos un circuito con un generador de energía de biomasa que nos permitió tener energía. Lo creamos nosotros mismos gracias a las cáscaras de maní. Mientras tengamos materias primas, somos autosuficientes. Ante un evento como este (mega apagón), tenemos la opción de aislarnos y brindar servicios normales a nuestra gente”, dijo Liliana Rueschet, alcaldesa de Ticino.

¿Como funciona?
La energía renovable producida en la planta de Ticino ya es suficiente para abastecer a casi 8.000 hogares, un número superior al número de viviendas de la ciudad. De esta manera, puedes vender tus excedentes al sistema de vinculación argentino, que es exactamente el que falló masivamente durante el Día del Padre 2019 en Argentina.
La provincia de Córdoba es la principal productora de maní del país. Para generar electricidad, miles de toneladas de conchas se recogen en contenedores y se transfieren a una caldera. Cuidadosamente quemado para minimizar las emisiones, el vapor se produce para impulsar turbinas que generan energía mecánica para la rotación. Un mecanismo acoplado luego la convierte en energía eléctrica. La planta utiliza filtros de partículas para controlar los gases y mitigar el impacto ambiental.
El proceso, que genera 4,63 MW por hora de electricidad, requiere unas 100 toneladas de subproducto al día. “Las cáscaras de maní que quemamos provienen del 75% de los campos vecinos, de donde se obtienen los residuos de biomasa necesarios para abastecer la central térmica durante todo el año”, precisó Fabio Bruschini, ingeniero a cargo de la fábrica de Lorenzati y Ruetsch.

Además de Tesino, otras tres empresas cordobesas producen energía a partir de biomasa con maní, y está prevista la construcción de otra para 2024. Aunque se reducirá la cantidad de residuos enviados a vertedero, el aprovechamiento evitará en todos los casos la dependencia de fuentes no renovables combustibles fósiles y crear beneficios para las comunidades locales.
Biomasa en América Latina
Hay varias instalaciones de energía renovable a base de biomasa en América Latina que utilizan diferentes tipos de residuos agrícolas e industriales para producir energía renovable y contribuir a la sostenibilidad energética en la región.
De acuerdo con la Plataforma de exploración de datos de energía renovable, había 227 plantas de energía renovable en México a partir de 2018. De ese total, 78 fueron biomasa, que utiliza residuos orgánicos como madera, bagazo de caña de azúcar y madera forestal. También existe un creciente interés en el país por el uso sostenible de los residuos sólidos municipales para el alumbrado urbano.
“Durante décadas, la producción de electricidad a partir de biomasa se limitó a las necesidades de la agroindustria, pero con el tiempo se logró aumentar la producción de los sistemas de cogeneración, que producían excedentes para la red pública y contribuían así al suministro de energía eléctrica. están cobrando cada vez más importancia en muchos países”, señala el informe del Observatorio de Inteligencia del Sector Energético de México.
Cada país latinoamericano utiliza sus residuos orgánicos como biomasa de manera diferente. En particular, depende de las peculiaridades de cada matriz productiva y de las materias primas disponibles. Por ejemplo, en Colombia se utilizan principalmente los residuos de la palma aceitera y la silvicultura.
De: +Comunidad (https://www.mascomunidad.org.ar/del-mani-a-la-energia-electrica-la-biomasa-como-fuente-de-energia-renovable-en-las-ciudades/)