Tres años consecutivos de Niña han puesto una pesada carga sobre las espaldas de la industria ganadera. Además de la mortalidad en el rancho, la sequía tuvo un impacto negativo en los índices reproductivos y productivos de los rebaños reproductores. En estos sistemas, la pérdida de la condición corporal del vientre y la disminución de las tasas de preñez impulsan las decisiones sobre el cuidado de los animales.
En esta misión, la gestión del destete resulta ser una maniobra clave, donde también se deciden la salud, la reposición, entre otros. A través de la voz de una consultora y productora, Agenda Aapresid trajo recomendaciones sobre cómo enfrentar con éxito el parón en 2023.
Condición corporal abdominal
En los sistemas de cría del país, uno de los problemas que se ha hecho más evidente en general como resultado de la sequía es la reducción de la condición corporal de las vacas. “En lugares donde la planificación brilla por su ausencia o donde es más difícil tener planes organizados, es probable que tengamos algunas sorpresas en términos de embarazo”, dijo el consultor y referente Darío Colombatto. Esto conducirá a menos terneros entre julio y septiembre de 2023, lo que significa menos destete en 2024.
Nicolás Bronzovich, productor y subdirector del programa Prospecto Aapresid del sureste bonaerense, señaló que el uso de las reservas, si bien se tradujo en mayores costos, les permitió mantener el porcentaje de preñez y la condición de la vaca. El productor forma parte de una empresa familiar con 2000 ha en la integración de la ganadería y la agricultura en el hueco del Salado, donde pone en explotación un hato de 400 vacas y los terneros entran en cría e invernada en capitalización. En otro establecimiento engordan terneros propios y comprados, que acaban en un corral.
El manejo debe enfocarse en destetar o separar las vacas que están en buenas condiciones corporales de aquellas que comienzan a mostrar costillas y «aletas de tiburón» en la espalda. Para las primeras, se puede usar un enfoque nutricional más limitado para salvar algo de pasto o cobertura otoñal, mientras que la vaca que no está bien necesita recibir el mejor recurso, como el sorgo forrajero, que se puede desechar durante el invierno. «Estamos destetando hoy para darle a la vaca más tiempo para descansar y recuperarse para que vuelva a estar en celo lo más rápido posible».
Los árbitros recomiendan un seguimiento constante del estado corporal del abdomen para valorar la necesidad de incorporar más reservas. La alimentación se perfila como una alternativa para complementar la energía o los concentrados proteicos para los terneros en la presa cuando no se dispone de pastos.

Nutrición de terneros para mantener ganancias por encima de 500 g/día
Durante el período de destete, lo ideal es trasladar primero a los terneros a recibir pastos balanceados en energía y proteínas, explicó el consultor. Con ello, el objetivo es mantener una ganancia de peso en torno a los 500-600 gramos diarios, para que los animales puedan ser trasladados a zonas verdes en otoño. “Allí queremos tener una alta carga animal y el manejo de pastos lo más estricto posible para tener una adecuada eficiencia en el uso y cosecha del pasto producido”.
En el caso de que sea necesario un destete precoz para permitir la recuperación de las madres, se aconseja colocar a las terneras directamente en corrales de recepción o de inicio, que consiste en confinar a los animales durante uno o dos meses y ofrecerles una alimentación equilibrada. muy proteico. Esto permite asegurar ganancias de peso de hasta 800 g por día, para luego llegar al reverdecimiento sin pasar por los pastos.
La salud, otro pilar del destete exitoso
En esta etapa se debe prestar mucha atención a las condiciones respiratorias, especialmente en el destete temprano. Los cambios de temperatura y el aumento de la cantidad de lluvia que se han registrado en las últimas semanas provocan una disminución de las defensas de los animales, haciéndolos aún más vulnerables a este tipo de infecciones.
Siempre que sea posible, se recomienda un tratamiento preventivo antes del destete. Dependiendo del origen y estado general de los terneros, a veces es necesario algún refuerzo. La queratoconjuntivitis, una enfermedad ocular altamente contagiosa, es endémica en la región de Bronzovich. Lo mantienen a raya rodando pasto de trigo para controlar la cañazón y con ese problema, “también es probable que vacunemos este año para reducir la carga de la enfermedad”.
Por otro lado, se recomienda monitorear los parásitos mediante el conteo de huevos en las heces para evaluar la necesidad de control. Una vez que regresan las lluvias, los parásitos se afianzan. Además del seguimiento continuo, está indicado respetar los descansos en los pastos y, si es necesario, alternar los antiparasitarios.
Todo lo anterior es posible en el marco de una correcta planificación del rebaño y del forraje, imprescindible en esta actividad que no conoce el corto plazo. Al mismo tiempo, la correcta disposición del sistema proporcionará una base sólida para la improvisación o la mejor solución a los problemas temporales que puedan surgir.