Las empresas del sector buscan «evitar el colapso del complejo agroindustrial de las pymes que abastecen de proteína de origen vegetal a las cadenas agroalimentarias del interior», subraya el comunicado.
Titulado «Proteína… ¡la proteína no tocará!», el documental compara su título con una frase pronunciada por Diego Maradona y dice textualmente:
Hace más de 21 años, el mayor ídolo deportivo y social de Argentina se despidió y admitió: «Me equivoqué y pagué, pero la pelota… la pelota no se ensucia»
En los últimos meses, el Gobierno Nacional, en un esfuerzo por cumplir con las exigencias del FMI, propuso una medida a favor de un exclusivo y selecto grupo multinacional de exportadores que les permitiera liquidar la soya, precursora de las hortalizas, con anticipación y a un precio diferente. tipo de cambio. proteína y el mayor ídolo productivo de la Argentina.
Con la implementación de dos ediciones del «dólar de la soja» que siguieron una estricta meta fiscal pero con un alcance muy corto, no se midió el enorme daño colateral que causaría a toda la industria agroalimentaria nacional.
En las últimas dos décadas, la proteína vegetal ya no es exclusiva de las zonas aledañas al Complejo Oleaginoso Rosario, sino que, a través de la amplia red de PyMEs agroindustriales de Extrusoras de Soja, está al alcance de todas las cadenas agroalimentarias del país. De Salta a la Pampa, de la Precordillera al Litoral. La producción de leche, huevos, res, cerdo, aves e incluso pescado, concentrados, soja texturizada y micronizada ha podido desarrollarse y alcanzar una alta productividad gracias a la proteína vegetal que tienen cerca las extrusoras de soja.
La necesidad de una solución inmediata es la federalización de la proteína vegetal, porque la nutrición proteica tiene un papel decisivo e insustituible en el desarrollo físico, intelectual y social para la mesa de todos los argentinos e incluso para la exportación.
Las empresas extrusoras de soja, agrupadas en las cámaras representativas que suscriben este documento, solicitan de manera urgente que se cree un espacio de discusión con los actores del sector para proponer alternativas que permitan mitigar los daños ocasionados en los próximos 100 días y así evitar el colapso de la complejo agroindustrial de pequeñas y medianas empresas, que abastece de proteínas vegetales a las cadenas agroalimentarias del interior del país.
Así como El Diez reconoció que tuvo que pagar su error personal, pero que no debe afectar al fútbol en su conjunto, así es el momento de reconocer que se cometió un error y que lo pagamos todos con escasez de cereales, subida de precios, planta. cierres, menos empleo, pero queremos dejar una cosa clara: ¡las proteínas argentinas no se tocan!
El documento fue rubricado por Marcelo Conde, Presidente de la Cámara de Extrusionado de Santa Fe, Pablo Sánchez, Presidente de la Cámara de Extrusionado de Entre Ríos, Juan Carlos Giaccone, Presidente de la Cámara de Extrusionado de Córdoba y Facundo Ferrari, Presidente de la Cámara de Extrusionado de Buenos Aires