La sequía histórica que ha atravesado nuestro país ya comienza a verse reflejada también en la logística comercial. Comenzando, cronológicamente, con el trigo, cuya campaña 2022/23 inició formalmente el 1 de diciembre, se observa un fuerte descenso en la circulación de camiones de descarga de trigo. Con base en información de CECOA y estimaciones propias, los puertos del Gran Rosario entregaron un total de 484.440 toneladas por camión hasta el 26/1, 83% por debajo del promedio de cinco años, el volumen más bajo desde 2013 y el segundo más bajo desde que se iniciaron registros en 2001.

Como reflejo de la falta de oferta, si damos seguimiento a la situación de los precios internos de los cereales en esta campaña, vemos que la evolución de los precios reportados por la Cámara de Arbitraje de Cereales de Rosario, medidos en dólares y convertidos al oficial tipo de cambio del Banco Nación, siguen siendo superiores a los registrados en el mismo nivel de cinco campañas anteriores como se muestra en la imagen adjunta.

Otras noticias sobre la situación del trigo esta semana provinieron del último dato oficial de molienda de pan de diciembre de 2022, publicado por la Secretaría de Agricultura y Ganadería de la Nación (SAGyP). En el primer mes de la campaña 2022/23 fue un total de 443.366 toneladas. Con la provincia de Buenos Aires sumando el 49% del total de material procesado y aportando 226.450 toneladas, le sigue Córdoba con el 23% (101.748 toneladas) y en tercer lugar Santa Fe con el 13% (58.050 toneladas). El resto provino de Entre Ríos (13.893 toneladas), otras provincias (39.107) y la capital del Estado Federal (4.118).
Comparando los datos de diciembre de 2022, inicio de la nueva campaña, con los datos del mismo mes de años anteriores, tenemos que las 447.000 toneladas de trigo industrializado en este nuevo ciclo, tanto molidas como exportadas, quedan por detrás de las 453.000 toneladas. diciembre de 2021, pero todavía están por delante de las 399 000 toneladas de diciembre de 2020 e incluso de las 434 000 toneladas promedio de los últimos cinco años, aunque el uso de trigo para alimento balanceado ha sufrido relativamente más que para la producción de harina.
En el panorama internacional, la noticia que repercutió en los mercados llegó desde Estados Unidos. La última estimación trimestral de granos del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) de este mes informó que las hectáreas de trigo realmente cultivadas en las praderas estadounidenses aumentaron con respecto a la estimación anterior. No están satisfechos con esto, el área plantada reportada es incluso mayor que la esperada por el mercado (14,64 millones de ha).

Como se muestra en la figura anterior, los acres sembrados con trigo de invierno aumentaron un 11 % en comparación con 2022, consolidando el mayor volumen sembrado de cereales en los EE. 10,2 M ha corresponden a trigo duro de invierno (HRW), 3,2 M ha a trigo blando rojo de invierno (SRW) y 1,5 M ha a trigo blanco.
A estos reportes hay que sumar interesantes volúmenes de ventas externas de trigo de Estados Unidos en los últimos días, junto con una reducción en las estimaciones de producción de trigo de Ucrania. Con ese marco, los futuros de trigo blando de Chicago cerraron cerca de 276 $/t este jueves, un 2% más que la semana pasada. Asimismo, el trigo duro cerró el jueves a 317 $/t, casi un 4% más esta semana.
Fuente: Bolsa de Cereales de Rosario